3 de marzo de 2025
Estamos iniciando el mes de MARZO, qué mejor momento para hacer aquello que hemos dejado de lado, ¿sí?
¡Pues si!!!!
Se puede tratar de una limpieza profunda en el hogar, de esas necesarias antes que inicie la primavera del hemisferio norte, aunque en nuestro país no la reconozcamos por las variables climáticas de nuestra ubicación. También puede tratarse de una limpieza del alma, limpiar rencores, negatividad, etc., o simplemente terminar lo que hemos iniciado, o empezar lo que hemos dejado de lado por tanto tiempo.
Hablemos de la postergación. Se trata de una respuesta al temor. Postergamos lo que no nos gusta, así sepamos que es algo que debemos hacer, tenemos que hacer o que queremos hacer. Siempre hay una excusa, esa excusa es la manera que tenemos de lidiar con el temor.
Los seres humanos postergamos porque tenemos dificultades para enfrentar los miedos, la incertidumbre, todo aquello que nos puede generar ansiedad o angustia. Ya sabemos aquel dicho, “No dejes para mañana lo que puedes hacer hoy;” o aquel otro, “al mal paso, dadle prisa.”
Y es que la postergación, además, nos da sentido de seriedad, de estar tremendamente ocupadas, de tener cosas importantes que hacer: “siento mucho no poder apoyarte con esto, pero tengo mucho trabajo”, o peor, “me encantaría poder tomar un descanso, pero tengo tanto que hacer, que no creo que pueda”. Y así vamos, creyendo que la vida está ahí para esperarnos.
Además, cuando la postergación se presenta, también puede ser que se disfrace de amabilidad, de preocupación por los demás. Está la persona que dice: “sí, yo puedo, dame ese proyecto, tengo algo que hacer, pero puedo apoyarte con esto.” Ese proyecto puede ser ir al super, hacer un mandado, tomar una tarea de la oficina y desarrollarla. Simplemente se trata de tomar tareas que nos aumentan las nuestras pero que por alguna razón nos comprometemos a hacerlas. Así nos llenamos de más actividades que no logramos hacer, pero justifica nuestra necesidad de sentirnos ocupadas.
Pero ¿de dónde viene esto? Si examinamos nuestras creencias, esas que nos atrapan y nos mantienen pegadas al suelo, podremos encontrar respuesta.
Recuerdan aquella frase, “el ocio es la madre de todos los vicios”. Sí, hemos oído muchas veces esto, y nos hemos encontrado con que creíamos que debíamos estar siempre ocupadas pues de lo contrario, seríamos viciosas. Así de simple.
Ahora sabemos por qué nos llenamos de ocupaciones, sean de nuestro interés o no, pues tenemos esa necesidad de parecer ocupadas, y de sentirnos ocupadas.
¿Qué tal si hoy que iniciamos un nuevo mes, nos proponemos limpiar nuestro closet imaginario en el que hemos dejado aquello que hemos postergado?
Hagamos un plan, definamos claramente como vamos a abordar cada tema y veremos que hay luz al final del túnel y sentiremos la satisfacción de haber logrado algo, ganarle a la postergación.
Y recordemos, el AGRADECIMIENTO es la LLAVE para abrir las PUERTAS de las oportunidades.
¡Las abrazo con cariño!!!
¡ABRAMOS PUERTAS!!!
Leave A Comment